Película de la semana: APOCALYPSE NOW

Apocalypse Now ocupa por derecho propio un lugar destacado en la mitología cinematográfica del siglo XX. Estamos ante una de las obras medulares de la cinematografía moderna. Uno de esos filmes imperecederos que se enriquece y revaloriza ante el avance imparable del tiempo. Su férreo magnetismo epopéyico la convierten en una parada obligada para la historia filmográfica. No sólo se debe comprender esta película como un acercamiento al conflicto Indochino, sino desde una óptica mucho más global y universal. Si para muchos críticos e historiadores del cine estamos ante la película definitiva sobre el Vietnam, creemos oportuno el reseñar que Apocalypse Now se ha erigido como uno de los títulos por antonomasia del género bélico.

El “gurú” del filme es Francis Coppola. Bastaría con observar alguno de los títulos que conforman su filmografía para explicar el interés que despierta una personalidad como la del cineasta norteamericano. Pero hay otras razones de mayor peso y envergadura. En multitud de ocasiones se le ha catalogado como un genio, desaprovechado diría yo, de esos que con su talento y maestría sientan las bases y el porvenir de las artes en sus diversas disciplinas. Megalómano empedernido y tozudo insaciable, de haber sido coetáneo de Orson Welles hubiera luchado junto al director de Sed de Mal para conseguir un espacio de libertad creativa. Es la mutua visión de una concepción cinematográfica particular la que los hace únicos. Como reseña Esteve Riambau: “Tras anunciar las grandes líneas de una revolución tecnológica del cine, tuvo que pagar la osadía de desafiar a Hollywood con el fracaso de los estudios Zoetrope”.